miércoles, 13 de junio de 2012

¿Enseñar o aprender?

- Prefiero estar segura -dijo la Rata muy pensativa, mientras frotaba el cañón de una escopeta para sacarle brillo. Cuando hubo acabado de desayunar, el Sapo agarró un palo enorme, lo blandió con fuerza y empezó a apalear a unos animales imaginarios.
-¡Ya les aprenderé yo a robarme la casa! -gritó-. ¡Ya les aprenderé, ya les aprenderé!
-No digas «aprenderé» , Sapo -dijo la Rata muy sorprendida-. No sabes ni hablar.
-Siempre te estás metiendo con el Sapo -protestó el Tejón malhumorado-. ¿Por qué no sabe ni hablar? Yo también digo lo mismo y no pasa nada.
-Lo siento-dijo la Rata humildemente-. Sólo que me parecía que debe ser «enseñaré» en lugar de «aprenderé».
-Pero es que nosotros no queremos enseñarles -replicó el Tejón-. Queremos que aprendan..., ¡que aprendan, que aprendan! Y eso mismo es lo que vamos a hacer.

 Fragmento de El viento en los Sauces  escrito por Keneth Grahame

El sábado pasado pasamos la tarde con unos amigos que antes eran los caseros de mi esposo y  que mostraron interes al saber que Di no va a la escuela,  yo no sabía que eran  ex-profesores y fue hasta después que me di cuenta por el tipo de preguntas y por su opinión.  No se pusieron en mal plan pero si llegaron a mencionar que entendían las razones pero que ¿cómo sabía yo que podía enseñar?  

Y esta es la razón de la entrada y del fragmento del principio, ¿cómo es que hemos llegado a creer que el proceso de enseñanza le pertenece a una figura de autoridad (llámese maestros o padres) y no al sujeto que esta aprendiendo?

La verdad es que cada vez me voy inclinando más a el aprendizaje natural y no dirigido.  Y son mis hijos los que me estan llevando hacia allá sobre todo el bb el que me mueve a seguir "sus" caminos y no los míos.  Por poner un ejemplo, ya sabe caminar y el proceso inició antes de los 8 meses cuando comenzó: 

- a ponerse en 4, 
- gatear un poquitin hacia atrás
- hacia adelante después de unas largas vacaciones donde se las paso en brazos, 
- pararse agarrandose de los muebles,
- caminar agarrandose de los muebles,
- pararse sin agarrarse
- y finalmente dar sus primeros pasos solo a eso de los 11 y medio, siempre combinado con las demás actividades ya aprendidas.

Sin embargo, aunque ya dominaba el caminar cuando fuimos a visitar a la familia de mi esposo hace un par de semanas escuche por ahí el comentario que le hicieron de "ven dame la manita y vamos a caminar que si no, no vas a dejar de estar en los brazos y aprender a caminar bien", claro es que esperaban que ya caminara y caminara y caminara. Pero yo no he forzado nada, le he dejado ser y avanzar a su ritmo.  Ha sido el solito que explorando su propio cuerpo ha logrado dominar esta habilidad que además no puede ser enseñada. Ha sido él quien hace un par de días ha decidido caminar y caminar sin que nadie este ahí armandole alharaca. Ha sido él quien ha adquirido la suficiente confianza y habilidad para lanzarse a hacerlo aún en el jardín donde el terreno no es plano ni parejo con una gran sonrisa y escándalo y que aún con múltiples tropezones y sentones no ha desistido sino hasta que se ha cansado. Si, en todo el proceso me he visto tentada a incentivarlo y ponerle algunos "ejercicios" pero el enseguida los rechaza dejando muy clara su postura de "NO INTERVENIR, BB APRENDIENDO".  Mi papel se ha reducido a proveerle de un ambiente seguro dentro y fuera y a tomarle en brazos para calmar sus lloros cuando el sentón  ha sido más fuerte de lo que puede soportar.

Y no es que dudase que no pudiera aprender a caminar sino que a pesar de todo lo que he leido tengo que estar alerta para no dejar que salga esa idea que aún sigue pululando en mi cabeza de: "antes" es mejor, es prueba que es sumamente inteligente y eso le dará ventaja cuando sea más grande.  Y hay aspectos en donde es díficil abandonarla.  Con el paso de los años he llegado a descubrir que respetar los procesos de aprendizaje de los demás requiere de una sabiduría tan infinita que espero al menos desarrollar la suficiente para respetar los de mis hijos por que ¡¡Yo quiero lo mismo que el Tejón!!

¿Y ustedes? 


 m

2 comentarios:

Laura dijo...

El eterno gran tema Ivett!!!

A mí me pasa que con la chiquita (4 años) me resulta muy fácil que elija qué, cómo y dónde.
Pero con Gaia de 8 y medio, no sé, si bien tiene mucha libertad y siempre trato de ponderme en el rol de acompañante, a medida que se hacen más grandes siento que hay mínimos saberes que es necesario enseñarles, y no estoy tan segura de si lo aprenderán así porque sí... es mi eterno dilema, y no se puede resumir en un comentario jeje! pero ya sabes de mis demonios al respecto, qué te cuento..
Te mando un abrazo, me encantó la entrada.

Ivett dijo...

Hola Laura,

Entiendo bien tus dudas y temores pero es que no es que vayan a aprender así por que si, uno crea un ambiente propicio para que el aprendizaje se dé. algo así como el "strewing" que habías algunas vez mencionado en tu blog.

Como menciono en el post es el bb el que con sus demandas provoca que le de más tiempo a su aire a mi otro hijo y lo que he descubierto en esos días es que si llega a interesarse por temas que yo creia que no y otra cosa que he observado es que aprende mejor aquellos temas que el propone.


Desde mis perspectiva te resulta mucho más fácil con la peque por que tienes más confianza en que sucederá tal y como sucedió con su hermana y por que sabes que hay un ambiente de aprendizaje del cual ella se esta nutriendo. Al menos es así como yo me siento con respecto al bb

Saludos y gracias por comentar